Autor: José Alfredo Sandoval Rincón

Especialidad en Fruticultura Tropical Universidad Veracruzana

La nutrición de los árboles de limón Persa es una de las actividades básicas que deben realizarse debido a que está considerada como uno de los factores que más limitan la producción y calidad de la fruta. El propósito de una adecuada fertilización consiste en incrementar la fertilidad natural del suelo y, por lo tanto, obtener un aumento del rendimiento de las cosechas. Para cumplir estos objetivos, la aportación de fertilizantes debe cumplir las funciones siguientes: aportar los nutrimentos que faltan en el suelo y complementar los fertilizantes extraídos por el cultivo.

Debe considerarse, que cuando un nutrimento se encuentra en los árboles en menores proporciones de las óptimas, al aplicarlo al suelo o vía foliar como fertilizante, se consiguen incrementos en la producción que logran pagar el precio del producto y su aplicación. Sin embargo, cuando éstos fertilizantes se agregan en exceso a las necesidades de los árboles, puede obtenerse un desequilibrio en la nutrición de éstos, lo que ocasiona una reducción en la cosecha y en la calidad de la fruta (Curti-Diaz et al., 2000).

Las investigaciones realizadas sobre fertilización en el cultivo de limón Persa, proporcionan suficiente información para llevar acabo los planes de fertilización sobre bases científicas. Al estudiar la nutrición de los cítricos, más que tratar de memorizar las diferentes dosis recomendadas, se trata de asimilar, en primer término, las funciones y el efecto que cada nutrimento provoca en los árboles de cítricos y, en segundo lugar, cuáles son los métodos y medios para diagnosticar el estado nutrimental de una plantación de cítricos y para definir cuáles son las cantidades apropiadas para aplicar de cada uno de ellos, fuentes, forma y fechas de aplicación (Sandoval-Rincón, 2013).

En árboles de limón Persa, se sugieren tres o cuatro aplicaciones de fertilizante al año, preferentemente en concordancia con las épocas de brotación del árbol. Estas épocas son: febrero, junio, septiembre y noviembre; en caso de efectuar tres aplicaciones, pueden realizarse en febrero, septiembre y noviembre, respetando la cantidad de fertilizante recomendada por año (Curti-Diaz et al., 2000).

Algunos productores incluyen dos aplicaciones de fertilizante en el otoño, con el objeto de incrementar la producción y mejorar la calidad de la fruta en el invierno, época en que se alcanzan los mejores precios del mercado.

El limón persa es infaltable a la hora de preparar buenas mezclas.

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Para mayor información:

darlin.barillas@popoyan.com.gt

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