La falta de lluvias y aumento de la temperatura en medio de la estación lluviosa se llama canícula. La adaptación a esta fenómeno climático es la estrategia a seguir.

El Ministerio de Agricultura, a través de la Dirección de Información Geográfica, Estratégica y Gestión de Riesgos, publicó el Informe Climático Agropecuario No. 3 resaltando que, según las predicciones climáticas para agricultura 2020 del INSIVUMEH, las condiciones de lluvias serán normales, por lo cual se espera que la canícula no sea prolongada según las estadísticas. 

¿Qué es la canícula?

Es el período de disminución de la lluvia durante la estación lluviosa y aumento de la temperatura en los meses de julio y agosto. Ocurre en los lugares que tienen un modelo bimodal en su distribución de lluvias. El periodo canicular para la meseta central de Guatemala se manifiesta principalmente en los meses de julio y agosto. Es un fenómeno meteorológico anual y recurrente, que de acuerdo con estadísticas climáticas se presenta del 10 al 20 de julio y del 5 al 15 de agosto.

El corredor seco con mayor afectación

En Guatemala, la canícula es más evidente en la región del corredor seco del Oriente del país, en el cual afecta a 46 municipios y en la franja costera cerca al Océano Pacífico. La disminución de la precipitación anual, puede darse en cualquier región, pero su duración e intensidad varían dependiendo de la región en donde se encuentre. Según el INSIVUMEH “En los últimos años se ha presentado la canícula en forma prolongada, o sea ha tardado más de lo normal, causando un déficit considerable en la cantidad de precipitación mensual, a este fenómeno se le conoce como sequía meteorológica”, o fenómeno del niño.

Fenómenos asociados al periodo de la canícula y potenciales efectos

– Escasez o mala distribución prolongada de la precipitación, modificando los períodos de cosecha y siembra o pérdida parcial o total del cultivo. En general, una disminución de la productividad agrícola.

– Disminución del nivel del agua en el suelo (nivel freático), ocasionando déficit de agua para que sea absorbida por las plantas.

– Excesos de evaporación.

– Aumento de las temperaturas, propiciando la propagación de plagas y enfermedades en los cultivos.

– Incremento de la velocidad del viento, ocasionando pérdidas por acame del cultivo.

– Impacto directo sobre la seguridad alimentaria en la población más vulnerable.

La canícula provoca una disminución de la productividad agrícola.

Manejo del suelo y agua es la mejor solución 

La canícula, siendo un fenómeno recurrente, puede ser manejada construyendo obras que mejoren la retención de humedad en los suelos y capacidad de almacenamiento de agua. 

Algunas de las obras y actividades más importantes se detallan a continuación.

– Almacenar agua en estanques o reservorios tipo Kit-Capp en época de lluvia antes de la canícula, para utilizarla en cultivos durante el período de sequía.

– Realizar acequias de ladera y pozos de infiltración para retener el agua por más tiempo en el suelo.

– Evitar la tala de bosques y mantener la cobertura vegetal para que los rayos del sol no

impacten directamente el suelo y lo desequen.

– Sembrar variedades tolerantes a la sequía.

– Mantener barreras vivas y muertas para retener la humedad del suelo.

– Fomentar los sistemas agroforestales (cultivos asociados con árboles).

– Incorporar materia orgánica al suelo: mejora la estructura, retiene agua y minerales, aporta nutrientes minerales lentamente para las plantas a medida que se descomponen (N, P, K, Mg, etc), produce activadores del crecimiento, mejora las condiciones físicas, produce mayor intercambio de nutrientes, incrementa la infiltración del agua, facilita la labranza del suelo, reduce la pérdida de erosión, proporciona nutrientes a las plantas, entre otros.

– Evitar la erosión hídrica, la cual es ocasionada por la remoción y transporte de partículas de suelo, por la acción de la lluvia, la gravedad y la escorrentía.

– Evitar la erosión eólica, causada por la acción del viento sobre los suelos en época seca, los cuales al aumentar la fuerza y la acción sobre sus estructuras, favorece el transporte de grandes volúmenes de partículas.

Almacenar agua para hacerla disponible en la canícula es parte de la solución.

El riego agrícola elimina la incidencia de la canícula

En los distritos de riego, se toma muy en cuenta el tema de la canícula y están preparados, dándole mantenimiento a los sistemas de captación, conducción y distribución, para tenerlos listos en el momento que los usuarios lo demanden. De esta manera, los cultivos establecidos no sufren por la falta de humedad y se eliminan los efectos de este problema.

Para más información se puede consultar la siguiente bibliografía.

INSIVUMEH (Instituto de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología, GT). (2020).

Perspectiva Climática para el trimestre mayo, junio y julio 2020. LXI Foro del Clima de

América Central. Guatemala, 10 p.

MAGA- UPGGR (Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Unidad de Planificación

Geográfica y Gestión de Riesgos, GT). (2009). Mapa de Clasificación Climática de la

República de Guatemala a escala 1:50,000 adaptado del Sistema Thornthwaite. 167 p.

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