En el 8vo encuentro de líderes agroindustriales -desarrollado en marzo pasado-, se habló sobre la importancia de las zanahorias en la actividad productiva agrícola del país.
Las zanahorias han alcanzado un nivel productivo muy alto, ya que hace 15 años, las variedades que se usaban lograban rendimientos de 500 quintales por manzana, sin embargo, actualmente los rendimientos sobrepasan los 1,200 quintales por manzana.
La búsqueda de tecnologías que permitan mejorar la productividad y por lo mismo la prosperidad de los productores agrícolas, es uno de los motivos que impulsaron este 8vo Encuentro titulado “Sabores de Guatemala para el Mundo”.
Para actualizarnos sobre estos cultivos se desarrolló un dialogo entre Noe Cifuentes, experto en vegetales de BEJO y Arturo Calel, líder productor del altiplano central, donde se concentra la mayor producción de este cultivo. Parte de la conversación se desarrolla en el siguiente artículo.
La única forma de salir adelante es tener las tecnologías
Esto expresaron los entrevistados, reconociendo que aquellos agricultores que han logrado las innovaciones básicas de genética, manejo agronómico del cultivo, nutrición y manejo integrado de plagas, han cambiado radicalmente la productividad de este cultivo.
Hace mas de 30 años, la Chantenay era el tipo de zanahoria que se producía en Guatemala. Con nuevas genéticas y tecnologías, las zanahorias han cambiado en la forma, color, productividad, resistencias a plagas y enfermedades y en calidad. Hoy hay tipo Chantenay, Emperador, Amsterdam, etc.
El sistema de siembra tambien ha cambiado drásticamente. Antes se sembraba al voleo, con alto desperdicio en semilla y en productividad. Hoy se siembra en tablones y en hileras con una mejor distribución de la semilla para lograr mas productividad, con beneficios muy altos para el productor.
Debido a los cambios en genética, tecnologías de manejo del cultivo, como preparación del suelo, uso de tablones, uso de hileras para mejor distribución de la semilla, nutrición y manejo integrado de plagas, los rendimientos se incrementaron a mas del doble pasando de 500 quintales por manzana a los 1,200 quintales que se obtienen actualmente. Una de las variedades mas rendidoras es la tipo Bangor.
El cultivo de zanahorias es uno de los nueve productos vegetales mas importantes del país con una producción estable desde hace mas de 10 años en alrededor de 4,500 manzanas, logrando una producción nacional de 5.4 millones de quintales. El área mas productiva es la región de Chimaltenango, especialmente Patzún y Patzicia.
De estos, el 60% se esta exportando a los mercados centroamericanos, especialmente El Salvador y Honduras.
Cultivos muy rentables
El cultivo de zanahorias asegura la inversión no importando el mercado, tanto si es cantonal, nacional o para la exportación. El producto no es muy perecedero, por lo que se puede manejar el ciclo para adelantar o atrasar la cosecha de acuerdo a los precios del mercado.
Diversificación del mercado
Con la introducción de las minizanahorias se abrió el mercado para los Estados Unidos y aunque aun es incipiente, tiende a un crecimiento, junto a las zanahorias preparadas en trozos.
Otro de los mercados es el del Caribe, el cual esta creciendo y las condiciones agroecológicas nos permiten ser altamente competitivos.
Manejo integrado de plagas
El principal problema son los nemátodos. Se debe trabajar un manejo integrado de manera preventiva. El mejor método es la rotación de cultivos y las variedades resistentes.
Muchas companías están trabajando esa parte de la resistencia a los nemátodos, por lo que pronto tendremos nuevas variedades resistentes y sin perder la calidad.
Riego como factor limitante
La infraestructura de riego es una de las limitantes para el crecimiento del cultivo. Patzun y Patzicia están en una región altas posibilidades de usar agua del subsuelo y especialmente el impulso al almacenamiento del agua de lluvia, por la precipitación que es arriba de los 1,200 mm anuales.
Recomendaciones
Una buena sugerencia que nos dejan los entrevistados es que antes de iniciar el cultivo se asesore de cuales son los mejores materiales, tanto por su resistencia como por su productividad, calidad y aceptación en el mercado.